
Tratamiento digital
A partir de aquí, todos los elementos físicos se han trasladado digitalmente a nuestras bases de datos. Son transformados en imágenes con formato JPEG y TIFF. Si es necesario, pasamos realizar pequeños retoques, como ajustes en los márgenes, defectos del documento o reconstrucción digital. Seguidamente las almacenamos y finalmente introducimos sus correspondientes metadatos.